Ex alumno dona 87 hectáreas de terreno a la UCR en San Ramón
Alejandra Amador Salazar, Periodista
Con el propósito de contribuir a preservar los recursos naturales y apoyar la investigación científica en el país, el microbiólogo y ex alumno de la Universidad de Costa Rica (UCR), Guillermo Monge Amador donó a esta institución de educación superior 87 hectáreas de terreno ubicadas en el distrito de los Ángeles en San Ramón de Alajuela.
Los terrenos que fueron aceptados por el Consejo Universitario en sesión N.° 5824, están localizados muy cerca de la Reserva Biológica Alberto Manuel Brenes, lo cual permitirá a la Institución ampliar los límites de ese espacio, así como consolidar más la Red de Áreas Protegidas de la Universidad y contribuir con el Sistema Nacional de Áreas de Conservación Proyecto Grúas II.
El estudio de la donación se llevó a cabo mediante una propuesta de miembro presentada por el M.Sc. Daniel Briceño Lobo, representante del Área de Ciencias Básicas ante este Consejo.
La donación está motivada, no solo en el gran cariño que el Sr. Monge y su familia le tienen a la UCR, sino también en su interés por la preservación de la naturaleza y la oportunidad para que la UCR pueda ampliar el área de cobertura y la cantidad de programas de conservación y docencia.
Al respecto, este ex alumno, graduado en el año 1955, manifestó al plenario que “la donación es un agradecimiento al Alma Máter” y recordó la gran experiencia que ha sido, tanto para él como para sus hermanas, hijos y nietos haber formado parte de esta Institución.
Por lo tanto, el Consejo Universitario, atendiendo la intención del Dr. Monge acordó que la propiedad sea dedicada de manera exclusiva a actividades relacionadas con la protección y conservación de la biodiversidad y el recurso hídrico.
Asimismo, le solicitó a la Administración que realice los trámites administrativos y legales para que el inmueble donado pase a ser parte de la Universidad de Costa Rica.
Reserva Alberto Manuel Brenes
La reserva Alberto Manuel Brenes se conformó en el año 1975, su extensión territorial es de 7800 hectáreas y cuenta con una gran cantidad de quebradas, un bosque en buen estado de conservación y una alta precipitación pluvial que permite aprovechar el recurso hídrico para el desarrollo hidroeléctrico en la región.